“¿Que tienes en la mano?” Le pregunto Dios a Moises.1
Al final de la Segunda Guerra Mundial, el famoso comediante Jimmy Durante fue invitado a entretener a los soldados heridos en un hospital de veteranos. El les dijo que solo podría hacer una pequeña rutina ya que tenia presentación en dos programas de radio ese día.
El hombre que lo invito se quedo sorprendido cuando Durante no se apresuro mas hizo tres rutinas completas.
El hombre le preguntó “¿por qué se quedó tan tarde, lo más seguro es que se haya perdido sus dos presentaciones en radio?
Allí en la fila delantera estaban dos hombres, cada uno de ellos había perdido un brazo, y ellos estaban aplaudiendo uniendo sus manos.”
En la economía de Dios, no importan si tenemos poco o mucho. Lo que hacemos con lo que tenemos es lo que cuenta para él. Cuando traemos lo poco que tenemos y se lo damos a Dios para que lo utilice en sus planes y trabajamos juntos, Dios puede hacer grandes cosas con y a través de nosotros.
Se sugiere la siguiente oración: “Dios mío, Estoy disponible. Utilízame hoy para ayudar a aligerar la carga de otra persona, para alentar a un amigo, amar a mi familia, para ser un testigo tuyo, o de alguna manera a ser ‘como Jesús’ con cada persona con quien tenga contacto el día de hoy. Gracias por escuchar y responder a mi oración. Con agradecimiento, en el nombre de Jesús, amén.”
1. Éxodo 4:2
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