La búsqueda de la felicidad es tan vieja como la humanidad. El Hedonismo, una Antigua filosofia de los Griegos, declaró que el fin principal del hombre era la felicidad. Democrito quien vivió en 460 AC, dijo “La felicidad es el objeto de nuestra conducta.” Aristipus, un estudiante de Socrates, dijo así, “El placer más intenso es el bien supremo y es el objetivo de la vida”.

La gente hasta hoy sigue en la búsqueda de la felicidad, a pesar de todo nuestro conocimiento y los logros, muchas personas todavía no han descubierto el secreto.

En la Universidad, la causa mas grande de muerte es el suicidio. Los hospitales están llenos con pacientes que se sienten solos y no estan felices. Algunos doctores dicen que el 80% de los pacientes tiene un tipo de estres emocional. Un famoso psiquiatra dijo “la neurosis central de nuestro tiempo es el vacío.” La Organizacion Mundial de la Salud de las Naciones Unidas dice que la depresión es el problema de salud numero uno del mundo.

La actriz, Marilyn Monroe, tenia todo lo que al parece era felicidad, belleza, dinero, fama y popularidad—pero ella se suicido. He leído que el actor, Mel Gibson, tuvo todo lo que el mundo puede ofrecer, pero nunca se sentía feliz o satisfecho. Esta fue una razón por la que pago y produjo, La Pasión de Cristo.

Esto fue dicho por Voltaire, quien fue famoso por su infidelidad, dijo en sus últimos momentos de vida, “Estoy perdido! Nunca debí haber nacido.” Y el millonario, Jay Gould, dijo en sus últimos momentos, “Supongo que soy el diablo mas miserable en todo el mundo.”

Actualmente, el dinero, fama, poder o belleza no nos hace felices o infelices. Son cosas externas. La felicidad viene de adentro. Es el producto de como nos sentimos interiormente. Si uno vive sólo para la felicidad personal, es probable que nunca la encontrara. Alguien dijo “La búsqueda por la felicidad es una de las fuentes principales de la infelicidad.”

La felicidad es muy diferente para cada persona. Depende en algunas necesidades particulares, habilidades, intereses y madurez. La felicidad para un hombre es ser contador y para otro, ser un granjero. La felicidad para una mujer es no tener mas hijos, y para otra, tener algunos mas. La realidad es que nada de estas cosas por si mismas pueden hacer a alguien feliz.

Para mi, la felicidad empieza con la honestidad y aprender a aceptarme por quien soy yo de verdad. De esta manera, puedo esforzarme y vencer mis debilidades.
Continuara. . .

Se sugiere la siguiente oración: “Querido Dios, ayudame a darme cuenta que la felicidad no es mi meta en la vida, pero es un proceso de vivir en armonía con tu voluntad, en armonía con mi mismo y en armonía con otros, es tener un  propósito mayor por el cual vivir. Ayudame a lograr estas metas y recibir el regalo de felicidad. Gracias por escuchar y responder a mi oración. Con gratitud en el nombre de Cristo Jesús. Amen.”

1. Lucas 12:15 (NVI).